Galván, Ortega y Galdós se estrellan contra un muro de pitones, carne y ninguna casta
Redacción: Carlos Ilián – marca.com
Plaza de Madrid. Tercera corrida. Más de media entrada. Toros de VALDEFRESNO/FRAILE MAZAS (2), lucieron unas enormes cornamentas que no hacían juego con una endémica falta de fuerza y de casta. DAVID GALVÁN (5), de nazareno y oro. Pinchazo y estocada. Un aviso (saludos). Dos pinchazos, media estocada y descabello. Un aviso (silencio). JUAN ORTEGA (5), de verde inglés y azabache. Estocada y tres descabellos (silencio). Dos pinchazos, media estocada y seis descabellos. Un aviso (silencio). JOAQUÍN GALDÓS (5), de canela y oro. Estocada (saludos). Estocada corta desprendida (silencio)
Dicen los panegiristas de la casa Fraile que Valdefresno tiene en Madrid un numeroso ramillete de toros importantes a los largo de los muchos años en los que esta insufrible ganadería se anuncia en la primera plaza del mundo. Hombre, estaría bueno si en tanto tiempo no hayan salido seis o siete toros buenos. Pero es que en la memoria nos quedan muchas tardes de inválidos o moruchones como los de ayer.
La corrida salmantina fue un muestrario de pitones, eso sí, impresionantes defensas, pero es que tanto pitón no hacía juego con la endeblez de remos ni con esa absoluta falta de casta que a veces se confundía con el choto morucho de las antiguas plazas de carros. Por supuesto que frente a este género los tres muchachos que se pusieron delante apenas pudieron traspasar la línea imposible que se encontraron para ligar dos muletazos seguidos.
Por ejemplo Galván, tres naturales decentes en su primero para tragarse luego la invalidez del cuarto. O el esperanzador Juan Ortega que se estrelló con el trastabillado segundo y con el imposible quinto. El peruano Galdós pudo templar tres o cuatro veces al tercero, al que mató de una estocada de premio y luego no pasó de un macheteo por la cara al infumable sexto.
Cartel del 17 de mayo
Toros de El Tajo y La reina para Joselito Adame, Román y Álvaro Lorenzo.
