El debutante herido por el segundo, al cual cortó una oreja, sale a lidiar el sexto y es ovacionado. Rafaelillo y Varea saludaron en todos sus turnos. Seria corrida cinqueña de Victorino.
Adultos, muy del tipo ancestral. Cárdenos en diversos matices, claros, oscuros, entrepelados, capirotes. Bien armados, astifinos, con 516 kilos promedio y el astuto talante de su casta, que hizo sus peleas emocionantes y avaló las lidias, pese al final embotamiento de la codicia en todos. Cuatro fueron aplaudidos de salida, primero, tercero, cuarto y quinto y de arrastre primero y quinto.
Octavio Chacón, vino a debutar en Valencia con quince años de alternativa, pero puso el arrojo y el compromiso profesional por encima de su veteranía. El toro de la presentación, el segundo, fue protestado. El único. pese a su añeja media tonelada, dignas púas y la doble brava pelea en varas. Replicó el quite a Varea con verónicas lentas, media y revolera de las cuales “Borrón” no se iba del todo. Le asestó cuatro doblones a medios y una primera tanda derecha sobreponiéndose, pero al tercer embroque de la segunda fue calado en la entrepierna, izado y luego apaleado en el piso.
Tronera en la taleguilla y sangre. Nada. No se dejó llevar y con el rostro tinto se enfrascó en una faena de susto porque el animal orientado le buscaba y se colaba. Cuatro series más así, de crudo valor y una estocada total arriba ejecutada en los medios cobraron la oreja unánime que sin vuelta se llevó a la enfermería.
Le operaron con anestesia local y tras correr el turno salió a lidiar el sexto. La gente con él. “Murmullo” tenía dos filosas velas, la izquierda era tremenda. Humillaba y se revolvía buscando zapatillas. Eso hizo que el muleteo, largo, ambidiestro, limpio y lento fuese más de a uno en uno que ligado. El público y la banda lo asumieron y acompañaron a fondo hasta el final. Mas los dos pinchazos sin estocada cerraron la puerta grande que se daba por segura.
Rafaelillo, en su elemento. El toro difícil, el ánimo dispuesto y el toreo más eficaz que bonito, más raudo que lento y más andado que quieto. Al imponente primero le abundo por naturales, puso la plaza de su lado y no le quitó pelo porque se hizo avisar y debió usar la cruceta. El cuarto fue bronco y revoltoso y otra vez la lidia antañona, el respaldo popular y la espada marrando. Se fue doblemente ovacionado.
Varea, bordó las suertes más estéticas en la tarde, pero las faenas menos estructuradas, desarmado en ambas. De todas maneras, su vocación de temple y ortodoxia destellaron, tanto como su desacierto con el estoque. Avisado en sus dos turnos, clavó una espada delantera baja y dos descabellos al tercero y cuatro pinchazos y una completa al quinto, para saludar por partida doble.
Los tres toreros se fueron aplaudidos, Victorino que daba muchos autógrafos yselfies dijo “Les pegaron duro,no salió el toro redondo”. Pero salió el toro de respeto y eso dio importancia a la tarde, digo yo.
FICHA DEL FESTEJO
Domingo 10 de marzo 2019. Valencia. 1ª de Fallas. Sol. Más de media plaza. Seis toros de Victorino Martín, cinqueños, serios desiguales de romana, cuatro aplaudidos de salida y a menos.
Rafaelillo, saludo tras aviso y saludo.
Octavio Chacón,oreja y saludo.
Varea, saludo tras aviso y saludo
Incidencias: Octavio Chacón cogido por el 2º, cornada escrotal de 4 cms. Tras cirugía con anestesia local sale a lidiar el 6º corriendo el turno.