La corrida en Villapinzón dejó una huella imborrable en la afición taurina. El arte supremo de Manuel Libardo brilló con un indulto histórico al quinto toro de Achury Viejo, un ejemplar bravo y enclasado que marcó la tarde. Los diestros José Arcila y Manolo Castañeda completaron una jornada cargada de emociones en la Plaza de Toros Santa Bárbara.
Redacción: Héctor Esnéver Garzón Mora- www.enelcallejon.co/ – Web Aliada
Ubaté – Colombia. El 8 de diciembre de 2024 será recordado como una fecha histórica en la tauromaquia colombiana. La Plaza de Toros Santa Bárbara de Villapinzón vivió una corrida de feria cargada de emociones, donde el arte de los toreros y la bravura de los astados se unieron en un espectáculo inolvidable. La ganadería de Achury Viejo, con una trayectoria sólida y respetada en el mundo taurino, presentó un encierro de extraordinaria presencia y comportamiento variado, siendo el quinto toro de la tarde el protagonista absoluto tras ganarse el indulto.
Achury Viejo: La bravura hecha genética
La corrida de Achury Viejo fue un ejemplo del esfuerzo ganadero por preservar la bravura y calidad de sus toros. Aunque algunos ejemplares mostraron limitaciones, el quinto toro se alzó como un símbolo de lo mejor de esta ganadería. Este indulto es un reconocimiento al trabajo arduo en el campo, donde se busca perpetuar las virtudes que engrandecen la fiesta brava.
Manuel Libardo: La cátedra del temple y el mando
Manuel Libardo demostró por qué es considerado uno de los referentes del toreo en Colombia. En su primer toro, un ejemplar bien hecho pero limitado en casta, ofreció un saludo capotero de alta estética, destacando verónicas templadas que arrancaron los primeros aplausos de la tarde. Con la muleta, hilvanó una faena torera, ortodoxa por ambos pitones, destacándose por el temple y la profundidad de sus muletazos. El público premió su entrega y arte con una oreja tras una estocada en buen sitio.
El momento cumbre de la tarde llegó con el quinto toro de Achury Viejo, que debió salir en cuarto lugar. Este ejemplar, de imponente estampa y gran bravura, permitió a Manuel Libardo desplegar todo su concepto. Desde las primeras verónicas hasta las bellas tandas en muleta, el diestro mostró un toreo cargado de sentimiento y precisión. Su faena fue un compendio de mando, temple y variedad. Tandas largas y bien rematadas por ambos pitones pusieron al público en pie.
El clamor popular se desató cuando el toro mostró un fondo excepcional, embistiendo con clase y entrega en cada muletazo. La petición de indulto fue unánime, y el Presidente, en un acto de justicia, otorgó la gracia al toro. Manuel Libardo fue premiado con dos orejas y rabo simbólicos, consagrándose como el triunfador de la tarde.
José Arcila: Elegancia y técnica
José Arcila también dejó su huella en la tarde. En su primer toro, un ejemplar enclasado y noble, mostró un toreo de capa elegante con verónicas bien ejecutadas. En la muleta, hilvanó una faena interesante, destacando por su temple y acople con las embestidas del astado. Tras una estocada desprendida, el Presidente le concedió dos orejas.
En su segundo toro, el cuarto de lidia ordinaria, Arcila enfrentó un ejemplar que, a pesar de prometer inicialmente, acabó refugiándose en tablas, mostrando mansedumbre. Aunque dejó destellos de calidad con la muleta, no pudo redondear su actuación y escuchó silencio tras la estocada.
Manolo Castañeda: Carisma y versatilidad
El joven Manolo Castañeda, conocido por su entrega y carisma en el ruedo, comenzó su actuación con el tercero de lidia ordinaria con una espectacular portagayola. Continuó con verónicas y una revolera que arrancaron fuertes ovaciones. En el tercio de banderillas, mostró alegría y precisión, conectando de inmediato con el público. Con la muleta, su faena fue variada, pero con altibajos, logrando tandas de calidad que dejaron buen sabor de boca. Una estocada desprendida le permitió cortar una oreja.
En el último toro de la tarde, Castañeda volvió a destacar en el tercio de banderillas con una ejecución espectacular que puso a la plaza en pie. Con la muleta, logró momentos interesantes por ambos pitones, pero los fallos con la espada, incluidos dos pinchazos, limitaron los trofeos a una ovación calurosa.
Agradecimientos
La empresa taurina dirigida por el ingeniero Ricardo Arandia fue clave para el éxito de la corrida, brindando un trato excepcional a la prensa y garantizando una organización impecable. Con lleno total en los tendidos, Villapinzón reafirmó su lugar como un bastión de la tauromaquia en Colombia.
Ficha del Festejo:
Villapinzón (Cundinamarca) – Domingo 8 de diciembre, 2024 – Plaza de Toros Santa Bárbara – Toros de Achury Viejo, correctamente presentada y con juego variado. Quinto toro, indultado. Manuel Libardo: Oreja y Dos Orejas y rabo simbólicos por indulto. José Arcila: Dos Orejas y Silencio. Manolo Castañeda: Oreja y Palmas. Lleno en la plaza. Incidencias: Villapinzón vivió una tarde de arte y pasión que permanecerá en la memoria de los aficionados como un homenaje al valor, la bravura y el respeto por la tradición taurina.