De Reparto: Toros y Ciudad 2024, Buen Hacer en el Segundo Tercio

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La Feria Toros y Ciudad de Manizales 2024 cerró con un exitoso festejo en el que los picadores y subalternos de a pie jugaron un papel fundamental. La precisión en la suerte de varas y el desempeño en banderillas, con actuaciones destacadas como las de Reinario Bulla y Edgar Arandia, aportaron un gran valor a la lidia, siendo reconocidos y aplaudidos por el público.

Redacción: Juan Pablo Garzón Vásquez – https://enelcallejon.webnode.es/ – Web Aliada

Manizales – Colombia. La Feria Toros y Ciudad de Manizales 2024 culminó con una corrida memorable, donde los picadores y subalternos de a pie jugaron un papel fundamental en el desarrollo de la lidia, mostrando una combinación de maestría, valentía y conocimiento que fue clave para el éxito del festejo. A pesar de que las miradas suelen centrarse en los toreros anunciados, el oficio de quienes ejecutan las suertes de varas y banderillas destacó en esta última tarde, marcando el ritmo de la corrida y aportando un valor incalculable a cada lidia.

El primer toro de la tarde fue atendido en la suerte de varas por Cayetano Romero, cuya vara cayó ligeramente desprendida, pero con la suficiente precisión para dominar al astado. En la brega, Andrés Herrera mostró una labor discreta pero correcta, permitiendo al toro colocarse adecuadamente. En banderillas, Arley Gutiérrez embrocó bien en su primer intento, aunque los rehiletes no quedaron en el toro, mientras que Juan David Ortiz dejó un excelente par que fue bien valorado por el público.

En el segundo toro tuvo una de las mejores suertes de varas de la tarde, ejecutada magistralmente por Hildebrando Nieto, quien colocó el puyazo en lo alto, aguantando con firmeza la embestida del astado y fue valorada por la parroquia. La brega estuvo a cargo de Ricardo Santana, quien, sin aspavientos, abrió los vuelos al toro de manera adecuada. En el tercio de banderillas, Francisco García colocó un primer par con acierto, pero el segundo no fue logrado, mientras que José Calvo, tras una buena ejecución, solo pudo dejar medio par.

El tercer toro permitió lucirse a Reinario Bulla en la suerte de varas, ejecutando una colocación perfecta que fue aplaudida por todo el público. Su destreza lo consagró como el mejor picador de la feria. Carlos Rodríguez fue impecable en la brega, destacándose por su precisión y temple. En banderillas, Antony Dickson colocó el primer par de manera correcta, aunque marró en el segundo intento, mientras que Brayan Valencia, aunque bien en su ejecución, no consiguió que los rehiletes quedaran en el burel.

Para el cuarto toro, Edgar Arandia fue el encargado de la suerte de varas, con una ejecución brillante que colocó el puyazo en el centro exacto, toreando con el caballo y aguantando el empuje del toro. Fue una actuación aplaudida por los asistentes. En la brega, Héctor Fabio Giraldo realizó su trabajo de manera oportuna y discreta, permitiendo una buena lidia del astado. En este caso, los banderilleros no participaron, ya que el propio Matador David Martínez contribuyó a esa suerte, ejecutándola con gran alegría y siendo fuertemente ovacionado por su destreza.

El quinto toro tuvo una suerte de varas cumplida de manera eficiente por parte de Efraín Ospina, quien controló bien la acometida del toro. Iván Darío Giraldo se encargó de la brega, cumpliendo sin mayores sobresaltos con su labor. En banderillas, José Calvo dejó un primer par sin resultado, pero logró un segundo par excelente que fue recibido con aplausos, mientras que Francisco García tuvo dificultades en su intervención y no consiguió cumplir con la suerte de manera efectiva.

El sexto y último toro de la tarde, que marcaba también el cierre de la feria, contó con la actuación de Adelmo Velásquez en la suerte de varas. Su ejecución fue eficaz y precisa, lo que le valió el reconocimiento del público, que lo despidió con aplausos. En el tercio de banderillas, el Matador Manolo Castañeda realizó la suerte, colocando tres pares reunidos en lo alto con gran conocimiento de los terrenos y siendo aplaudido por su entrega y valentía.

La tarde cerró con éxito, demostrando una vez más que el trabajo silencioso pero esencial de picadores y subalternos es clave para el desarrollo de la fiesta brava. Su profesionalismo y dedicación dejaron una huella imborrable en la Feria Toros y Ciudad de Manizales 2024, una celebración que, además de los éxitos de los Matadores, brilló gracias a la labor de estos héroes invisibles que aportan técnica y arte en cada tarde.

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