Redacción: Jerónimo y Federico Baquero Toro’s
Lo Bueno
La plaza registró un entraron.
El tendido joven lució pañuelos lilas o chenel.
Los doblones con suavidad de las tablas a la boca de riego.
La faena gozó de mucho temple y suavidad.
Las banderillas de Ricardo Santana. Saludo en el tercio.
Banderillas de José Garrido al tercero.
La pelea del cuarto en el caballo.
La brega de Alex Benavides en todos los toros.
Buenos pares de Herrera y Pineda, saludaron desde el tercio.
El quinto de menos a más, fijo en las embestidas.
En el cierre Castella permitió un quite a los sobresalientes de espada, Juanito Ortiz y Juan Sebastián Hernández.
Brindis a Juan Carlos Gómez, gerente de Cormanizales, quien fue el artífice de la reaparición del francés en Manizales.
Faena con tiempos y espacios bien formulados. Todo a favor del toro.
Los jóvenes del tendido joven sacaron en hombros a Castella.
Lo Malo
Solo por unos pocos instantes Boticario miro los tableros.
La espada del primero, no fue eficaz y tuvo que usar la cruceta.
El segundo fue carente de chispa, raza y bastante tardó.
Carlos Rodríguez falló repetidamente con la puntilla en el segundo y en el cuarto.
El tercero flojo de manos. Falto de fuerza.
No había razón para el cambio, las condiciones, no son defectos.
El tercero tardo en exceso.
El cuarto tampoco fue apto para el lucimiento.
La espada del cuarto, también trasera.
El quinto también escaso de fuerza.
El palco alto, concedió una vuelta al ruedo al toro inconsulta a uno, que sí bien fue bueno, buscó camino a los tableros.
La espada caló al toro.
Lo feo
Se lanzó al ruedo el presidente de la Unión de toreros de Colombia como espontáneo.
El toro de Juan Bernardo Caicedo, más chico, quelícero primero.
Castella anduvo largo con la espada, todas muy traseras.
Tumbó al caballo de Efraín Ospina, en el quinto.
