La Feria de Fallas 2025 concluyó con un vibrante mano a mano entre Román y Borja Jiménez, en una tarde marcada por la responsabilidad torera del valenciano y el escalofriante percance del sevillano. Con un serio encierro de La Quinta, Román brilló con temple y entrega, sumando dos orejas, mientras que Borja, tras una faena de gran tesón, fue brutalmente volteado al entrar a matar, siendo trasladado a la enfermería con politraumatismos.
Redacción: Héctor Esnéver Garzón Mora- www.enelcallejon.co/ – Web Aliada
Arbeláez – Colombia. La Feria de Fallas de 2025 bajó su telón con un festejo de gran contenido torero, en el que Román Collado demostró una vez más su entrega y responsabilidad ante su afición, mientras que Borja Jiménez protagonizó un sobrecogedor episodio de la dureza de la tauromaquia. El encierro de La Quinta, serio y de impecable presentación, exigió firmeza y colocación a los diestros, en una tarde en la que el temple y el estoicismo se impusieron a la adversidad del viento y las dificultades de algunos astados.
El festejo comenzó con ‘Cocherito’, un cuatreño de carnes prietas y mirada desafiante, que Román supo entender desde el saludo capotero. Con lances acompasados a la verónica, el valenciano marcó el pulso de una lidia que tuvo en la muleta su punto álgido. Desde el primer muletazo se evidenció que el toro necesitaba ser llevado con la muleta siempre puesta, y así lo hizo Román, que fue templando al burel hasta sacarle lo mejor por el pitón izquierdo. La faena alcanzó cotas de buen toreo, aunque la espada, trasera, le privó de premio. Ovación.
El drama llegó con ‘Farolillo’, el primero del lote de Borja Jiménez, un cinqueño de 560 kilos que se movió con peligro sordo desde el inicio. Tras un brindis al Rey, el sevillano supo entender la embestida, exigiendo firmeza y terrenos exactos. La faena fue de aguante y colocación, siempre tratando de encontrar la tecla para domeñar la embestida descompuesta del toro. Pero el drama se desató en la suerte suprema: al entrar a matar, el toro hizo por él de manera fiera, empitonándolo por los pechos y zarandeándolo de forma espeluznante. Tras quedar inerte en la arena por unos instantes, fue trasladado a la enfermería y posteriormente ingresado en el Hospital “La Salud”, donde se le diagnosticó politraumatismo, aunque sin lesiones internas graves. Román se hizo cargo del toro, despachándolo con solvencia.
Le tocó el turno a ‘Rabanero’, el tercero, toro bajo y bien hecho que planteó dificultades a Román en el capote. En varas empujó con bravura, pero en la muleta demostró una movilidad sin entrega, exigiendo firmeza al valenciano, que supo darle el sitio justo. Por la derecha logró los mejores momentos de la faena, pero el viento molestó en demasía, lo que dificultó la continuidad de la obra. En un descuido, el burel lo buscó con malas intenciones tras la estocada, pero por fortuna salió ileso. Ovación tras aviso.
La primera oreja de la tarde cayó con ‘Pegajoso’, el cuarto, un toro de excelente clase por el pitón derecho. Román lo entendió a la perfección, logrando series de mano baja y gran empaque, lidiando con un viento que no dio tregua. La faena fue a más, destacando una serie final de mucho temple. Con la espada, Román se volcó y dejó una estocada en lo alto, suficiente para que el presidente concediera la oreja.
La emoción se disparó con ‘Famoso’, el quinto, un toro de vuelta al ruedo por su extraordinaria embestida por el derecho. Román, consciente del material que tenía, lo aprovechó desde el recibo capotero, en el que incluso se permitió dos verónicas de rodillas. En varas, el toro se arrancó de lejos, enloqueciendo los tendidos. Ya con la muleta, Román lo cuajó por el derecho con toreo largo y profundo. Por el izquierdo, el toro se quedaba más corto, por lo que volvió a la diestra para rubricar una obra de gran altura. Mató de estocada certera y paseó una oreja de peso, mientras el toro era premiado con la vuelta al ruedo.
El cierre de la feria llegó con ‘Corujo’, un toro de complicada embestida que derribó de forma aparatosa al caballo y que se presentó reservón en la muleta. Román lo intentó todo, pero el astado no se prestó al lucimiento. No estuvo acertado con los aceros y fue silenciado tras aviso.
Al final, la noticia de la evolución de Borja Jiménez llegó como un alivio para el toreo. A pesar de la brutal cogida, las pruebas descartaron lesiones internas graves, aunque el diestro se recupera de un fuerte traumatismo. Mientras tanto, Román se marchó con la satisfacción del deber cumplido, con dos orejas en el esportón y la admiración de su tierra por su entrega y responsabilidad en la tarde más esperada de las Fallas 2025.
Ficha del Festejo
Miércoles 19 de marzo, 2025 – Plaza de toros de Valencia. Feria de Fallas – Décima y última de abono – Corrida de toros – Mano a mano – Toros de La Quinta, muy en tipo. 1o: Pronto, metió la cara y con fondo; 2o: Con un peligro sordo; 3o: A media altura y con fondo; 4o: bravo, encastado y con clase por el derecho; 5o: Bravo, enclasada y pronto sobre todo por el derecho; 6o: Huidizo, desentendido y sin franqueza. Román Collado (Terno grana y oro): Ovación, Ovación tras aviso, Oreja, Oreja y Silencio tras aviso. Borja Jiménez (Terno corinto y azabache): herido. Incidencias: Saludaron ovación en el quinto por sus pares Juan Sierra y Luis Blázquez, y Francisco Ponz por su gran tercio de varas.
