Lo bueno
Cañaveralejo no se quedó sin toros gracias al grupo de quijotes liderados por el diestro Luis Bolívar, que decidieron echarse sobre sus hombros la responsabilidad de organizar la versión 2024 de la Feria de Cali.
El diestro Antonio Ferrera sacó hasta la propia boca de riego a Luis Bolívar para brindársele la lidia del primero de la tarde.
La empresa entregó a la fuerza pública un total de 1.700 por tarde para reconocer el compromiso de los uniformados con el país y especial con el sur occidente del país.
La lentitud en las ejecutorias de Bolívar, todo con mucha pausa y parcimonia.
El tercio de banderillas de Ricardo Santana al quinto del festejo
Bolívar le brindo a Juan Carlos Polo y Alejandro Valencia, socios de la empresa Toro Vive.
La vara de Luis Viloria al sexto del festejo, el toro prácticamente lo desmontó de la cabalgadura y en costeño se mantuvo firme con la vara hasta alcanzar nuevamente su posición de monta y terminar su labor en todo lo alto.
Ferrera la recibir el premio de la música en el que cerró el festejo, pidió a la banda que ejecutara el pasado le feria de Cali.
Lo malo
La demora para iniciar el festejo debido al toca de tráfico que se presentó en las inmediaciones de la plaza.
El tercio de banderillas del primero del festejo. Mucho nervio y poca efectividad.
El palco en el primero de la Feria bastante dadivoso. Una oreja tras una oreja defectuosa.
El el quinto, segundo de Bolívar el palco repitió hierro concediendo un indulto que no está formulado en el buen devenir de la fiesta, el toro apenas cumplió y Bolívar superó lo planteado.
La mansedumbre del cuarto, primero para el debutante Fernando Adrián.
Lo feo
Poca asistémica en la primera de Cali.
La suerte de descabellos de Bolívar a su primero.
Algún sector del público gritaba toro, toro, toro sin justificación ante un toro bueno pero no excepcional. Un indulto injustificado.