Los toros de la ganadería salmantina han tardado dos minutos y trece segundos en llegar a la plaza, en el encierro más rápido de este año.
Redacción: Marco Antonio Hierro – Cultoro.es – Web Aliada – Foto: Emilio Méndez
Pamplona – Colombia. El quinto encierro de San Fermín 2024 ha sido muy veloz, con un toro de capa negra adelantado que ha sembrado de peligro en todo el recorrido desde la cuesta de Santo Domingo. La velocidad arrolladora los astados de la ganadería salmantina de Domingo Hernández, que se han estrenado este jueves en los encierros de Pamplona, ha dejado una carrera de mayor riesgo, accidentada, con muchas caídas y el menor tiempo en llegar a la plaza en lo que va de las fiestas, con un tiempo de dos minutos y 13 segundos.
Según el parte médico provisional, hay siete solicitudes de traslado al Hospital Universitario de Navarra por contusiones, ninguno por asta de toro.
La ganadería salmantina de Domingo Hernández es la novedad en estos Sanfermines, ya que nunca había corrido por las calles de Pamplona y se desconocía como podía ser su participación en los encierros. Sí lo había hecho, por última vez en 2015, la ganadería de Garcigrande de la que se ha separado.
Los toros son Molinito (nº1) de 570 kilos, Loquito (nº68) de 525 kilos y Arrebato (nº98) de 570 kilos, los tres de capa colorada; y Ostentoso (nº18) de 595 kilos, Genovés (nº 36) de 545 kilos, Lunático (nº44) de 540 kilos, de pelo negro.
La ganadería de Domingo Hernández pasta en la finca El Palancar de Tramuntía, ubicada en la localidad de Pozos de Hinojos. Son animales, por lo general, fibrosos, con longitud de pitón, bien cornidelanteros – el arranque de los cuernos se inicia en la parte delantera del testuz y avanza hacia el frente-.
Por la tarde, en la plaza de toros de Pamplona habrá uno de los carteles más esperados: Alejandro Talavante, Daniel Luque y Juan Ortega. Oportunidad para que Daniel Luque, actual ganador de la Oreja de Oro de RNE, recupere su mejor versión, después de haber salido por la Puerta del Príncipe en la Feria de Abril de Sevilla. En San Isidro, el sevillano no tuvo suerte con los toros que le correspondieron.
