Vestido de malva y plata y después de poco más de dos años, el francés Sebastián Castella reapareció en la Feria de Manizales con poco más de tres cuartos de entrada, lidiando toros de las Ganaderías Ernesto Gutiérrez, Juan Bernardo Caicedo y Las Ventas del Espíritu Santo de juego y presentación desigual.

El abre plaza correspondió a la Ganadería Ernesto Gutiérrez a quien le realizó una faena pulcra pese a la mansedumbre del toro, tandas llenas de clase, tres cuartos de estocada y descabello, palmas.

El segundo de Juan Bernardo Caicedo de justa presencia y fuerza, se fue a menos, la estocada no fue suficiente y tras fallo con el descabello el toro cae. Silencio, toro pitado en el arrastre.

El toro de Las Ventas del Espíritu Santo fue el tercero de la tarde que fue devuelto, entró el reserva de la misma Ganadería que fue débil y sin emotividad, estocada trasera y caída, palmas.

El cuarto de Juan Bernardo Caicedo peleó en el caballo tuvo más transmisión y dio juego para tandas templadas que no pudo redondear por la estocada trasera, silencio y pitos al toro.

El quinto correspondió a la Ganadería de las Ventas del Espíritu Santo manso, pidiendo tablas, realizó una esforzada labor el matador, estocada de efectos casi inmediatos, el juez le otorga dos orejas y vuelta al ruedo al toro.

El Cierra Plaza Ernesto Gutiérrez Bravo, noble y fijo en la muleta en la que hubo transmisión en ruedo y tendidos pero por fallos con la espada tocó descabellar y escuchó palmas.