El toledano pone toreo a una tarde con cuatro hierros, marcada por la falta de raza y fuerza. Un vehemente Román da vuelta al ruedo y Joselito Adame se va silenciado.
Cambió el clima. Se fue el sol, mermó la temperatura y arreció el viento. Así, con la plaza a tres cuartos, ocho toros cuatreños, excepto el sexto. Disparejos. Cuatro de El Tajo mansurrones y sosos. Dos (segundo y tercero) de La Reina, devueltos por inválidos. Un sobrero de Torrealta, segundo bis noble, y otro tercero bis de Montealto, bronco. Fueron en total, cuatro negros, dos colorados y dos castaños de buenas láminas, que dieron 577 kilos promedio. Su sello fue la desforzada falta de raza.
Joselito Adame abrió con un torazo. Pese al ventarrón, hasta el último tercio la cosa iba bien. Buen saludo a la verónica, celo en el peto, buen tercio de Martín y Sánchez, quite de Román… Luego… ni toro ni torero quisieron. Cites dubitativos al hilo reconvenidos por la cátedra. Tardanza, cara alta, porfía sosa, pinchazo, par fierrazos bajos, pitos al arrastre y silencio al espada.
El manseo del cuarto fue adornado por gaoneras tremendas de Román y unos ovacionados pares de Miguel Martín y Fernando Sánchez. Adame se atempera con ayudados altos y temple por bajo en una faena de buen recibo, que terminó frustrada por el acero. Pinchazos descolocados, aviso, bajonazo, protestas justas
Román, enfrentó al segundo bis de Torrealta, pues el titular fue devuelto por inválido. No pudo torear de capa, dejando que Lorenzo brillara en el quite a la chicuelina. Ya con la muleta, flameante, y echando más vehemencia que pureza soliviantó el tendido tirando de largo muletazos derechos, ligados, que el toro tomaba franco, mas no muy humillado. La estocada recibiendo, desprendida, dio paso al aviso, a una petición parcial no atendida por D. Rafael Ruiz de Medina Quevedo y a la vuelta de revancha. Silenciado con el quinto, mansote y aburridor que tras pases y pases falleció de pinchazo y estocada.
Álvaro Lorenzo, estrelló su vocación estética contra la ventisca y el astifino y bronco tercero bis de Montealto, (el titular de La Reina, también había sido devuelto por inválido), que además tiraba la cara arriba. Pases pintureros aislados en medio de la nada. Pinchazo desprendido y crucetazo sacaron a todos de penas.
Hubo que esperar casi tres horas, pero con el sexto vino el mejor toreo de la tarde, Cadencia, postura y mando en las verónicas. Apretados ayudados por alto. Lentitud y dibujo en el trasteo redondo a lo cual contribuye la fijeza y el compás de “Cacareo”. Pausa y gusto en todo, pero toro a menos. Con la plaza de su parte pincha en sitio y pone una estocada fulminante. La petición es negada. Luego del regalo de la Puerta Grande en la segunda, el palco parece querer amortizarlo por cuotas. Bueno. La ovación, merecida.
FICHA DEL FESTEJO
Sevilla. Viernes 17 de mayo de 2019. Plaza de Las Ventas 4ª de San Isidro. Tercio de aforo. Nubes y viento. Ocho toros disparejos; cuatro de El Tajo mansurrones y sosos; dos (2º y 3º) de La Reina, devueltos por inválidos. Un sobrero de Torrealta, 2º bis noble, y otro 3º bis de Montealto, bronco.
Joselito Adame, silencio y silencio tras aviso.
Román, vuelta tras aviso y petición, y silencio.
Álvaro Lorenzo, silencio y saludo tras petición.
Incidencias: Saludaron tras parear el 4º, Miguel Martín y Fernando Sánchez.