Perera, con una segunda oreja protestada del bravo tercero abre su sexta Puerta grande. Finito y Urdiales naufragaron frente a sus lotes. Diverso encierro.
Seis cuatroañeros astifinos de Fuente Ymbro, bien pero disparmente presentados. Cuatro negros, dos castaños que dieron 557 kilos de promedio, con 109 de diferencia entre menor y mayor. Dieron peleas diversas todos fueron a los caballos donde los picadores no se ahorraron. Luego se fueron inéditos, menos el bravo tercero ovacionado en el arrastre.
Miguel Ángel Perera, encontró su sexta Puerta Grande de Las Ventas, en un encastado “Pijotero”, una emotiva faena derecha y una gran generosidad presidencial que justificó el rechazo purista. Cargó el de Puebla del Prior a la verónica, rotulado terreno hasta el platillo, donde paró al poderoso con media dibujada. Bien. Dos precisas varas de Ignacio Rodríguez. Bien. Un ovacionado tercio de Vicente Herrera y Javier Ambel. Bien.
Brindis al Rey Emérito. Bien. Una faena larga de orientación derechista, que obligó el aviso antes de la igualada. Mmm… Construida desde la quietud, el cite largo, la rima, el dibujo, la mano baja y dorada por el ataque bravío de lejanías, con enrazada nobleza. Bien. El público feliz. Bien. El volapié en corto, por derecho y la estocada desprendia y desarmada. No tan bien. La ovación al arrastre. Bien. Y las dos orejas. Mal. Una hubiese ahorrado a Miguel el inmerecido desaire de las protestas.
El sexto que fue apaleado por Francisco Doblado, llegó a la muleta extenuado, lengua fuera y sangrando hasta las pezuñas. Tras dos por alto cayó de costado y luego arrastró lastimero su buena clase. Qué pesar. Murió de una en hueso y media sin comentarios.
Finito de Córdoba, volvió a Madrid en el tono de toda su larga carrera. A ver si lo que sale deja. No el encastado y poco fiable primero, que le inspiró más que creatividad precaución. Par lances desahogados y un muleteo inconexo, citado al hilo, con el estaquillador por la punta y la pata retrasada. Pincho, espadazo desprendido y silencio. Con el respetabilísimo cuarto al que no pudo retener en el capote y que tumbó a “El Patillas”. Poco de nada… pinchazo, espada tendenciosa y otra vez silencio.
Diego Urdiales, no logró parar de capa al serio y suelto segundo que prefirió tumbar a Oscar Bernal. A partir de dos series cortas derechas, la fanaticada tuvo que guardarse los oles, pues el pinchazo, la estocada inane, el aviso y el descabelló no dieron para más. Con el quinto no remata tres verónicas ilusionantes y luego, tras un par de tandas, otro de sus recitales del unipase inquieto, para pinchar y dejar media caída.
La corrida comenzó muy auspiciosa. Día del santo. Sol, lleno de “no hay billetes”, SM Juan Carlos I con su hija la Infanta Helena y su nieta Victoria Federica en barrera, y Urdiales recibido con ruidosa ovación, a la cual invitó a sus alternantes. Todo al comenzar era una fiesta, pero al final… discusión.
FICHA DEL FESTEJO
Sevilla. Miércoles 15 de mayo de 2019. Plaza de Las Ventas 2ª de San Isidro. Lleno de “No hay billetes”. Sol y calor. Seis cuatreños de Fuente Ymbro, bien pero disparmente presentados, con 557 kilos promedio, encastados y duramente castigados. Ovacionado el 3º en el arrastre. “
Finito, silencio y silencio.
Urdiales, silencio tras aviso y silencio.
Perera, dos orejas protestadas tras aviso y silencio.