El matador peruano recoge en Las Ventas de manos del Nobel de Literatura el premio por su arrolladora temporada de 2018
Redacción: elmundo.es
De peruano a peruano. De Paquiro a Paquiro. La imagen de Mario Vargas Llosa entregando el galardón más prestigiado del toreo a Andrés Roca Rey resume a golpe de click no sólo lo que fue la gala celebrada anoche en el ruedo de la Monumental de las Ventas, sino, además, la fusión de culturas y la internacionalidad que la Tauromaquia representa. Nadie mejor que el Premio Nobel de Literatura para coronar a su compatriota, llamado a ser el nuevo mandamás del escalafón, y cuya arrolladora temporada de 2018 fue considerada en sí misma como el acontecimiento taurino del año. Así lo estimó por unanimidad el jurado del premio otorgado por El Cultural de EL MUNDO y que este año cumple su décima edición.
Hace no mucho tiempo, Roca Rey era tan sólo un niño que en los patios de cuadrillas se fotografiaba con sus ídolos soñando algun día compartir paseíllo con ellos. Hoy aquel niño no sólo ha cumplido el sueño sino que además ha conseguido dejar descolgados a sus rivales a base de una brutal regularidad de triunfos que le han encumbrado en lo más alto con tan sólo 22 años. A esa infancia quiso referirse Roca Rey en su discurso tras recoger la escultura obra de Víctor Ochoa. «Me gustaría tener conmigo ahora al niño que con siete años se puso por primera vez delante de una becerra en el Perú y decirle dónde estoy hoy y con quién», explicó en referencia al premio Nobel, con el que se deshizo en elogios.
«Recibir este premio de usted tiene todavía más valor. Usted ha escrito que la libertad es un valor supremo. Y estoy completamente de acuerdo. La libertad es un derecho que todos tenemos y que nadie nos puede quitar», dijo antes de finalizar su intervención con un mensaje para aquellos quienes, como él hizo en su día, se marquen un propósito de vida. «Seguro que hoy hay un niño de siete años que quiere ser torero y que aspira a ganar algún día el premio Paquiro. Me gustaría decirle que nunca deje de perseguir sus metas», afirmó, a la vez que agradeció a EL MUNDO por su línea editorial en defensa de los toros.
«La libertad es un derecho que todos tenemos y que nadie nos puede quitar» ROCA REY
Vargas Llosa, ganador del Paquiro junto a Pere Gimferrer en 2010, destacó la capacidad incontestable en los ruedos de su compatriota. «Ha llenado plazas, ha electrizado tendidos y son los grandes toreros como él son los que han de mantener vivo el antiguo arte del toreo»
El premio Nobel no dudó en poner en valor la Tauromaquia que tanto ama. «Defender la Fiesta de los Toros es defender una tradición profundamente enraizada en nuestra cultura y en nuestro pasado y que ha estimulado el quehacer artístico de poetas, novelistas y ensayistas«.
Con la misma explosividad que su llegada el lunes a Las Ventas, en un espectacular Lamborghini Urus de 650 CV, Roca Rey marcó el ritmo de su temporada 2018 descerrajando las puertas grandes de las principales plazas. No pasó por alto este detalle para ninguno de los asistentes, entre los que hubo varios representantes de la política española. El presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, además de rendirse al poderío del peruano, abogó por la protección de la Fiesta por ser parte de la historia del país. «Los toros suenan a España y España suena a toros», dijo.
«Defender la Fiesta de los Toros es defender una tradición profundamente enraizada en nuestra cultura y en nuestro pasado» MARIO VARGAS LLOSA
Hasta el ruedo de Las Ventas acudió el presidente del PP, Pablo Casado, que posó en la Puerta Grande con Roca Rey; y también asistieron el presidente de la Fundación Concordia y Libertad, Adolfo Suárez Illana, el candidato del PP a la Alcaldía de Madrid, José Luis Martínez-Almeida o el portavoz adjunto del Grupo Parlamentario de Ciudadanos, Miguel Ángel Gutiérrez.
El director de EL MUNDO, Francisco Rosell, destacó «la magia del toreo» que atesora Roca Rey, al que dio las gracias «por contribuir al resurgimiento de la Fiesta y por proyectar la universalidad de la misma» en tiempos difíciles en los que el «tancredismo» que ha abundado «ha llevado al toreo a quedar arrinconado y enredado en muchos prejuicios».
Luis Abril, presidente del jurado, quiso reseñar la forma tan apabullante de proclamar vencedor del premio al peruano en el fallo.
El acto de entrega del Balón de Oro del toreo estuvo dirigido por la torera Cristina Sánchez y por el jefe de la sección de Toros de EL MUNDO, Zabala de la Serna, que explicó el porqué de la importancia de la irrupción del ganador. «La fiesta brava que vertebra España, Francia y Portugal y estrecha los lazos con nuestros países hermanos de América tiene en el nombre de Andrés Roca Rey la viga maestra. El torero exacto en el momento oportuno».
«El tancredismo ha llevado al toreo a quedar arrinconado y enredado en muchos prejuicios» FRANCISCO ROSELL
La entrega del Paquiro, patrocinado por Nautalia, volvió a ser un punto de encuentro de primer nivel de personalidades, recibidas por la comitiva de Unidad Editorial, encabezada por su presidente, Antonio Fernández-Galiano, junto a Francisco Rosell, la directora de El Cultural, Blanca Berasátegui y el académico Luis María Anson. El pasado más glorioso estuvo representado por su majestad El Viti y Ángel Teruel; también Juan Mora asistió con su sobrino y novillero Alejandro Mora; y, cómo no, el ganadero Victorino Martín, que obsequió a los presentes con su discurso contra el animalismo pronunciado en el Senado el pasado 22 de enero al frente de la Fundación del Toro de Lidia.
Rafael García-Garrido, clave en el renacimiento del Paquiro, compartió asiento con Simón Casas, su socio al frente de la gestión de Las Ventas, dentro de un acto al que también acudieron, entre otros, el productor teatral Enrique Cornejo, el productor de cine y presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, el presidente y fundador de la cadena AC Hoteles, Antonio Catalán, o el director del Canal Toros, Ignacio Frauca.