DICE DIRECTOR DE LA CORPORACIÓN TAURINA DE BOGOTÁ
Redacción: elespectador.com Javier González Penagos / Miguel Jaramillo Ángel
A 15 días de que arranque otra edición de la temporada taurina, Juan Bernardo Caicedo la defiende y destaca los beneficios económicos que representa para la capital. Asimismo, asegura que el Distrito les ha cumplido.
El ganadero y empresario Juan Bernardo Caicedo asumió el año pasado la dirección de la Corporación Taurina de Bogotá, que ganó el contrato para organizar una nueva temporada. Aunque la administración de Enrique Peñalosa declara no estar de acuerdo con la fiesta brava, en cumplimiento de un fallo de la Corte Constitucional, posibilitó su desarrollo.
A menos de 15 días de que inicie el festejo en la capital, la tercera en lo que va de esta administración (luego de permanecer durante cuatro años suspendida), Caicedo habla del proceso que para organizar esta nueva edición y de lo que le retribuirá la fiesta brava a la ciudad: 14 % de lo que recauden por boletería. Les responde a quienes critican el espectáculo y se declara confiado de que los tendidos estarán llenos.
¿Cómo fue el proceso para hacerse a la organización de la temporada?
El IDRD abrió el concurso en octubre. Fue bastante retrasado y tardío, pero se dio cumplimiento a la sentencia que obliga a la Alcaldía a abrir la licitación. Adjudicaron el 5 de diciembre, lo que nos llevó a que solo se organizaran tres corridas por el corto tiempo. Las condiciones no fueron fáciles, pero en un mes logré armar esta temporada y las boletas se han vendido más que nunca. La solidaridad también está presente. Habrá llenos, porque creo que los bogotanos aman la libertad y que se respeten sus derechos.
Parece que la sensación es que el Distrito cumplió a regañadientes…
Sí, fue bastante tarde, pero no puedo entrar a pelear con quien me ha amparado un derecho. Con el Distrito estoy muy agradecido por su colaboración y la seguridad que me están brindando para llevar a cabo estas tres corridas.
¿Hubiera querido hacer más?
Hasta 10.
¿Que ganará la ciudad?
Debemos dar un 14 % de lo que se haga en boletería, más los impuestos, que son casi un 40 % de todo. Este es un espectáculo muy gravado, que genera unos réditos importantes para la nación y la ciudad. Creo que una tarde de toros genera más dinero que 20 partidos del fútbol en El Campín.
¿Habrá novilladas? Critican que se han dejado de hacer porque son gratuitas y no les generan réditos…
No las organizamos ahora por el tiempo, pero quedamos en dar dos en agosto durante el Festival de Verano. Aspiro que este año se llene la plaza, pues las novilladas son el espectáculo que más gente llevaba a ese Festival.
¿En la plaza habrá restricción para consumir alcohol o el ingreso de niños?
Contractualmente no se ha fijado ninguna. No tengo limitación.
Es decir, ¿los niños podrán ingresar y se podrá consumir alcohol?
Los niños siempre podrán entrar y el día que no los dejen también pueden pedir que se les ampare su derecho. Ya lo del licor sí es un tema de Policía, no mío.
¿Y la seguridad para los asistentes?
Las autoridades nos garantizarán una seguridad impecable como el año pasado, para que no vuelva a suceder lo que pasó hace dos años, cuando los taurinos fuimos agredidos por desadaptados.
¿Cree que pueda repetirse eso?
Los asistentes estarán vigilados, cuidados y amparados por la Fuerza Pública. No entiendo cómo en una ciudad como Bogotá, que es la cuna de nuestra democracia y de las leyes, haya gente desadaptada que se le ocurra pegarles a otros porque van a una fiesta tradicional de más de 200 años, que genera empleo y es lícita. Nosotros tenemos un derecho amparado por la ley y no entiendo, ¿pegarle a la gente? Son esos que aman a los animales y les pegan a los seres humanos.
Este año en Medellín no hubo corridas. ¿Cree que en Bogotá se pueda regresar a ese escenario?
Algo parecido sucedió aquí por una alcaldada, pero afortunadamente Colombia todavía es un Estado de derecho y se puede acudir a los jueces, que pese tardan, pero fallan. En el caso de Bogotá fallaron como se sabe, amparando un derecho como las corridas de toros y estoy seguro de que en Medellín la afición, de la mano de importantísimos juristas, está interponiendo acciones. Es que a los mismos hechos el mismo derecho.
¿Cree que la temporada será exitosa?
Nos están demandando muchas boletas. Tendremos los tendidos llenos y estamos seguros de que el alcalde Enrique Peñalosa y todas las autoridades nos van a garantizar el derecho de ir a nuestra fiesta. Estamos viendo una luz al final del túnel. Hubo gente que, con ánimo político, nos golpeó muy duro y desconoció muchos derechos. Hemos luchado porque se reconozcan y se amparen. Mientras haya un niño, como mis hijos, que amen esto, no se va a acabar.
¿Cómo hacerles frente a quienes no dejan de oponerse a la fiesta brava, entre ellos jóvenes y animalistas?
Estoy seguro de que las universidades públicas colombianas no son el reflejo de Colombia. Nos quieren llevar a un mundo de comer vegetales y líquidos, pero el ser humano, por mucho tiempo, ha usado los animales para digerirlos y comerlos. Imagine cuántos marranos se matan al día en Colombia, cuántos bovinos, cuántos pollos, cuántos pescados, y nadie hace un escándalo. ¿Por qué nadie habla de las peleas de gallos? Aquí hay más de 12 galleras y mueren 200 o 300 pollos diarios. ¿Por qué no hablan de eso? Porque ahí está el pueblo, y claro que los toros son del pueblo, pero en las galleras hay gente muy grande, es el espectáculo que más mueve. Era mejor meterse con los toros, que es un espectáculo organizado y bonito, el cual había que romper y acabar, todo por los señores de la izquierda.
¿Puede estar la fiesta permeada por intereses políticos?
Esto lo ha usado Gustavo Petro como un trampolín político, pero les dije hace tiempo a los políticos que quieren lucrarse de esto, que eso ya es de él. Nosotros vamos el 10 de febrero con 10.000 personas a la plaza de toros pagando. Le aseguro que si se hace una convención de animalistas no llegan 100.
¿Cómo atraer a la juventud a este tipo de espectáculos, teniendo en cuenta la resistencia que genera?
Creo que hay una afición grande que es joven y la vamos a motivar. Los precios son asequibles. Hacemos esfuerzos y queremos que Bogotá tenga una feria digna, importante y bonita como lo merece nuestra ciudad.