Interesante Novillada con ejemplares de Armerías de virtudes aprovechables, Novilleros entregados y alegría en el campo bravo por un joven semental.
Redacción: Héctor Esnéver Garzón Mora
Manizales – Colombia. La dehesa Armerías en la novillada con caballos del Ciclo –Toros y Ciudad- mostro las muchas gamas de lo que es el bravo y lo que lo compone: casta, bravura, nobleza, acometividad, prontitud y todo ello en diferentes calificativos, pero gratifica también ver jóvenes toreros que pese a la poca oportunidad, tienen el toreo metido en su ser y se esfuerzan por no dejar escapar la oportunidad, los resultados favorables para unos, para otros no, algunos con sin sabores, pero el conjunto del festejo la verdad sea dicha muy positivo para la fiesta del toro bravo, para Manizales, para la Empresa y para la Afición.
En la novillada con caballos del Ciclo –Toros y Ciudad- como ya lo resalte anteriormente se tuvieron ejemplares de la ganadería Armerías, encaste Domecq, propiedad de Don Rafael Moscoso, que fueron bien presentados al individual, dispares en conjunto y de juego variado, destacándose el novillo corrido en quinto lugar de nombre Galopero, marcado con el número 408 de 380 kilos de peso y lidiado por el manizalita Julián Mateo, quien recibió el honor del indulto. Vale decirlo que desde el momento del sorteo, por hechuras era la atracción del encierro y se auguraba que trajera dentro lo que reflejaba su trapío para ir de vuelta al campo a padrear, como por fortuna ocurrió. Los restantes cinco dieron lo suyo con cosas favorables, otras no, pero que redondearon una tarde que hacía mucho tiempo no se vivía.
Juan Gómez -Dinastía- (Terno grana y oro): Tuvo dos novillos muy diferentes en su lote. Con el que abrió plaza de nombre Chacalito, marcado con el número 434 de 382 kilos de peso que fue pronto, alegre, tosco, limitado de clase, tendiendo a puntear estuvo técnico y por momentos sin temple, hilvano faena que llegó a la parroquia, culmino con una estocada pelín caída. Oreja. Con el cuarto de lidia ordinaria no hubo mucha suerte, el burel de nombre Triunfador fue soso, blando de remos delanteros y algo tardo, -Dinastía- se esmerado, porfió pero no logró lograr redondear, culminó en el unipase. Estocada pelín desprendida. Silencio.
Julián Mateo (Terno tabaco y oro): Encontró en su lote las dos caras de la moneda. En el segundo de lidia ordinaria, astado llamado Arrero, no encontró mucha materia prima para destacar, el burel fue áspero, no gozó de clase y no trasmitió, eso hizo meya el Manizalita, que pese a hacer las cosas bien técnicamente, se dejó contagiar del sin sabor del novillo y su comparecencia no pasó del mero trámite, lo impactante de ese capítulo y que caló en los tendidos fue el correcto y efectivo uso del acero. Leves palmas en el tercio. Vino la gloria para el hijo de la capital caldense en el quinto de lidia ordinaria, encontró a Galopero, marcado con el número 408 de 380 kilos de peso, novillo bien hecho, de fina estampa, bravo, noble, pronto, que metía muy bien la cara y que con sus recursos y oficio aprovecho Mateo, fue parsimonioso, cada momento lo hizo como lo sentía, destaco en muleta una tanda de naturales excepcionales, marcados por el gusto y recibidos por los aficionados con mucho aprecio, logró indultar al bonito Galopero y sin restar mérito a la autoridad, el palco alto solo concedió un trofeo, hecho que ya lo había visto en esta Plaza hace unas temporadas con el Matador español Matías Tejela, pero esos gestos de Usía lo permite el reglamento vigente. Oreja simbólica con dos vueltas al ruedo por petición de todo el público.
Juan Sebastián Hernández (Terno nazareno y plata) En su primer capítulo se las vio con un novillo que tuvo justa fuerza, noble y que metía bien la cara, virtudes que aprovechó sin duda, parsimonia la clave, buena técnica y muy estético, dejo tandas relevantes, con el acero media lagartijera efectiva. 2 orejas y vuelta al ruedo al toro. Con el que cerró plaza no tuvo la misma suerte por no rubricar con la tizona a la primera, pues tuvo un novillo pronto, encastado, pero algo áspero, sin embargo el Sogamoseño lo entendió, lo aprovechó, tiro de él e hilvano una buena faena que se quedo sin éxito por ausencia de buena suerte suprema. Silencio.
Ficha de Festejo
Sábado 13 de Octubre – Novillada con caballos del Ciclo –Toros y Ciudad 2018– Ejemplares de la ganadería Armerías, encaste Domecq, propiedad de Don Rafael Moscoso, que fueron bien presentados al individual, dispares en conjunto y de juego variado, destacándose el novillo corrido en quinto lugar de nombre Galopero, marcado con el número 408 de 380 kilos de peso y lidiado por el manizalita Julián Mateo. Juan Gómez -Dinastía –: Oreja y Silencio. Julián Mateo: Leves palmas en el tercio y Oreja simbólica con dos vueltas al ruedo por petición de todo el público. Juan Sebastián Hernández: 2 orejas y Silencio. Lleno en los tendidos.
Hoy cierra el ciclo “Toros y Ciudad 2018” con la corrida: Toros de Ernesto Gutiérrez, encaste propio proveniente del Santacoloma y el Murube, propiedad de Don Miguel Gutiérrez para los Matadores: Cristian Restrepo, Curro Martín, Moreno Muñoz, David Martínez, Rocío Morelli y Guillermo Valencia.