A pesar del palco, que le negó el doble premio en el quinto, éste paseó oreja y oreja en la última del abono donostiarra; emotivo adiós sin premio de Padilla e intermitente Manzanares en su tarde.
Cerraba Feria la plaza de toros de Illumbe de San Sebastián en la tarde de este miércoles. Se lidiaban astados de Garcigrande y Domingo Hernández para Juan José Padilla, El Juli y José María Manzanares.
Ovacionado tras aviso resultó Padilla tras el primero de la tarde, un animal de Garcigrande que mantuvo la movilidad y con el que el jerezano expuso ya de capote, recibiéndolo con una larga cambiada en el tercio. Alegría capotera le dio a un animal al que banderilleó llegando a la afición vasca. En faena, el torero de Jerez lo pasaportó por ambas manos, finalizó por manoletinas, mató de estocada pero los descabellos le quitaron el premio. Silenciado resultó Juan José Padilla en el toro de su despedida de San Sebastián.
Una oreja tras un estoconazo paseó El Juli del segundo de la tarde, un animal humillador que le aguantó la proposición de mano baja a López durante todo el trasteo. Eso, y los bellos pasajes por la mano diestra conseguidos por el madrileño, propiciaron tras el estoconazo de Julián el primer apéndice del festejo. Una oreja con clamorosa petición de la segunda fue el resultado de la quinta función de la tarde, ante un palco que incomprensiblemente no concedió el segundo premio a un torero que realizó una labor para la historia de este coso. Buen animal el que tuvo delante aprovechado en todo momento por un Juli en su sazón, bajando constantemente la mano y llegando arriba con fuerza. Incomprensible decisión del palco.
Ovacionado resultó José María Manzanares frente al tercero de la corrida, un toro que tuvo movilidad pero del que finalmente no obtuvo premio. Silenciado tras aviso resultó en el sexto.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Illumbe, San Sebastián (Guipúzcoa). Última de feria. Corrida de toros. Tres cuartos de entrada.
Toros de Garcigrande y Domingo Hernández.
Juan José Padilla, ovación tras aviso y silencio.
El Juli, oreja y oreja con fortísima petición de la segunda.
José María Manzanares, ovación y silencio tras aviso.