Redacción: Héctor Esnéver Garzón Mora – Enelcallejon.webnode.es – Web Aliada
Corrida interesante la de apertura de Feria por todo el componente frente a la actitud de los actuantes y un Paipamba de nombre Trifón noble, encastado y bravo.
Cali – Colombia. Los entornos, la atmosfera, el clima y los ambientes hacen de un momento el júbilo, la aburrición o la normalidad, pero mucho más que todos estos factores, la actitud frente a las situaciones es la que suma o resta. En la primera de Cañaveralejo los entornos no eran emotivos, la lluvia, bendición en muchas partes, no era bienvenida al albero caleño por todo lo que genera: piso inestable, poca afluencia de público, distracción, trastos más pesados y muchas cosas más, que si las enumero se me suma otra cuartilla. Lo destacable fue la actitud de los actuantes que echaron pa´lante el festejo y mejor aún los buenos aficionados que vivieron la corrida.
Por ponerle un poco de sabor, vamos a decir que se tenía un mano a mano de ganaderías, dos hierros muy reconocidos en el Valle se encontraban formando una corrida: Fuentelapeña y Paispamba, que por ascendencia vienen de la línea Parladé y que dejaron en ruedo caleño un balance positivo, tal vez no se le vio la dimensión profunda a los bureles por lo acuñado anteriormente pero en términos generales los astados aportaron más para bien que para mal, exceptuando el quinto bis que la verdad sea dicha fue un manso de libro: mirón, desentendido y caminador.
Juan José Padilla (Terno frambuesa y oro) tuvo que abrir plaza en un completo lodazal, algo que impone un mayor reto y hace tomar prevenciones, el jerezano no lo dudo y así lo hizo, honestidad justa para hilvanar una faena que alcanzo para la vuelta al ruedo y dejar un aroma de toro bueno. El cuarto de la tarde tuvo mucha más condición para la ortodoxia que para lo que se le hizo, el querido Juan José genero más toreo para la galería que para los entendidos, logró conmover pero se enfrío la cuchara con los aceros, tibias palmas tras dos avisos.
Sebastián Ritter (Terno azul pavo y oro) tuvo en su primera comparecencia arrojo, ganas de querer ser, pero los deseos no alcanzaron para difundir arte, la espada se fue a mal sitio y se perdió la posibilidad de un mayor reconocimiento. No hay mucho que decir artísticamente hablando de lo hecho con el quinto bis, le pidió de todo, lo positivo y es lo que se debe destacar, es que el antioqueño estuvo ahí, busco agua en pozo seco a no más pedir y dio la cara sin amilanarse, incluso se debe aclarar que si escucho los tres avisos no fue por mal uso de los aceros sino por lo mismo que daba el burel.
Jesús Enrique Colombo (Terno berenjena y oro) estuvo por decirlo de manera teatral en contra escena, con el que le dio poco mucho arrojo y con el que le podía dar muy medido, eso no quiere decir que el venezolano no hubiese estado bien, lo que quiero dar a entender es que a veces las condiciones las empleamos desproporcionadamente y seguro que en favor de escena los resultados serían mucho más positivos, lo valioso es que gusto en Cali y confirmó que su campaña 2017 fue valiosa.
Ficha del festejo
Cali, Colombia – Martes 26 de Diciembre, 2017 – Monumental de Cañaveralejo – 1ª de Feria – Toros de las ganaderías Fuentelapeña y Paipamba bien presentados al individual, desiguales en conjunto y de variado juego destacándose el corrido en cuarto lugar de la ganadería Paispamba, de nombre Trifón que fue noble, encastado y bravo. Juan José Padilla: Vuelta tras saludo y Leves palmas tras dos avisos. Sebastián Ritter: Saludo tras aviso y Tres avisos. Jesús Enrique Colombo: Saludo desde el tercio y Palmas. Un acuarto de aforo.