Redacción: Lucho Herencia – Cultoro.com – Web Aliada
Alberto López Simón y Joaquín Galdós cortaron una oreja cada uno a la corrida de Zalduendo que hizo cuarta de la Feria del Señor de los Milagros
Lima – Perú. Se enfrentaban esta tarde, en la cuarta de la Feria del Señor de los Milagros de Lima, mano a mano dos de los toreros con mayor predicamento en Perú: Alberto López Simón y Joaquín Galdós. Lo hacían con un encierro de Zalduendo que había volado desde la dehesa cacereña a la capital peruana.
«Dependiente”, de Zalduendo, era el toro que abría el mano a mano, con el que trató de fijar la embestida Simón del de Zalduendo sin llegar a lucirse. Sin apretar en el caballo peleó el animal, quitando sin pulcritud el torero madrileño. En banderillas hizo hilo a Vicente Fernández sin llegar a prenderlo. Por estatuarios inició su labor Simón a un toro que sabía de inicio lo que se dejaba atrás. Las primeras tandas de derechazos fueron aguantando parones y miradas, sonando la música por petición del tendido. En el penúltimo muletazo prendió al torero arrancándole de cuajo los machos del vestido de torear. Se repuso el de Barajas para, con el toro manseando, lograr pegar pases por alto que encendieron a la afición. Pinchó en el primer encuentro, dejó una estocada casi entera que hizo guardia. Ovación con división de opiniones.
«Asistente” llevaba por nombre el segundo, un toro al que Galdós recibió por verónicas con mucho sabor. Quitó por chicuelinas antes del tercio de banderillas ejecutados por Darcy Tamayo y El Cebolla, echando el toro la cara arriba. Por bajo comenzó su labor Galdós, con una rodilla en tierra, para luego torear con mucha clase por la mano derecha, quedándose quieto. Poderoso se colocó por ese lado, para luego quedarse colocado a zurdas, corriendo con gusto la mano. Abrochó con intenciones la faena entre los arreones y puntazos del animal en la última tanda. Por trincherazos terminó su labor. Metió con habilidad la espada, aunque un punto baja. Ovación.
Simón inició el trasteo a «Opuscado”, el tercero, doblando la pierna para luego incorporarse a la verónica, serie que remató con una media. Con poco gas salió el toro de su encuentro con el caballo y los capotazos de tanteo de López Simón. Comenzó por estatuarios su labor para luego torear por abajo al toro para someterlo luego, intentándolo por el derecho con suavidad. Aun siendo descompuesto en su embestida el de Zalduendo, se colocó pronto por derechazos toreando con efectismo en el tendido. A la zurda era mejor el toro, dejando con serenidad y muy despacio naturales de calidad. Superior la siguiente tanda, con regusto el torero y sumándole variedad con molinetes y calentando a la afición. Pasmosa quietud y valor dejó en la siguiente serie, corrigiendo a base de temple y quietud, corriendo la mano adecuadamente con una plaza entregada. Dos pinchazos hondos precedieron a una estocada. Ovación.
«Varón” llevaba por nombre el cuarto de la tarde, con el que mostró soltura capotera Galdós lidiándolo por piernas. Con las ideas claras Galdós inició con dos muletazos de tanteo, haciendo todo con suavidad y temple. Clase dejó en los muletazos Galdós, comenzando con protestas la música en la tercera tanda. Tesón y mucha voluntad dejó en su tanda Joaquín, sin llegar a conectar al natural con un toro carente de clase. Lo intentó de todas las maneras el limeño con el animal más apagado. Acortó la distancia y los muletazos fueron más lucidos encontrando la colocación adecuada. Habiendo encontrado el sitio, logró una tanda superior a diestras, agradecido por la concurrencia con una ovación al final de la serie. En el final de trasteo, puso gusto y toreando con mucha calidad haciendo volver a sonar la banda. De menos a más fueron las tandas, creciendo el compás y ritmo del trasteo. Espada en mano, dejó tras un molinete de rodillas y varios pases de pecho, dejó una estocada un punto caída pero efectiva. Oreja.
El quinto de la tarde lo recibió Simón suave a la verónica, dejando un buen puyazo el piquero para probarlo en el capote el de Barajas ante un animal para nada humillador de inicio. Con doce muletazos inició faena para luego echarse de rodillas e irse a los tercios, cerrando la serie con un pase de la firma. Dispuesto y a media altura se ajustó por derechazos, teniendo delante a un enemigo soso, que se venía a menos y sin punto de transmisión. Al natural llevó la base de la firmeza, aguantando algunos gañafones y exponiendo en una siguiente tanda, donde la meta era alargar la embestida del toro, aunque sin llegar a conjugarse con el público por el poco nervio del burel. Expuso en corto por circulares invertidos cerca a los tendidos de sol, donde realizó toda la faena y logró calentar al personal. Manoletinas ajustadas y un cambio de mano finalizaron el trasteo antes de ir por uvas y dejar una entera caída. Oreja.
«Visionario” llevaba por nombre el penúltimo de la tarde, que salió y se emplazó para luego embestir brusco al capote de Galdós, basando el inicio en fijar la embestida de su oponente. Midió y se defiendió tras el puyazo, y no puso las cosas fáciles en banderillas, midiendo, cortando y soltando la cara al sentir los arpones. Torero inicio por bajo de Galdós Antes de ponerse a torear por derechazos en dos tandas que fueron a más, aplomado entre las tarascadas y buscando someter al toro. Continuó por la diestra, siendo intermitente la siguiente tanda y va a intentarlo al natural, delante de un oponente que le exigió sobre esa mano, regresando por derechazos. Las intenciones se vieron diluidas y no logró cerrar la tanda, yendo a por el acero. Palmas.
Ficha del Festejo
Plaza de toros de Acho, Lima, Perú. Cuarta de la Feria del Señor de los Milagros. Corrida de toros. Más de media plaza. Seis toros de Zalduendo. Alberto López Simón, ovación con división, ovación y oreja. Joaquín Galdós, ovación, oreja y leves palmas.